Cuando tenía poco menos de 5 años, mi padre me llevó por primera vez a un entrenamiento de fútbol… ⚽
Sólo después de unas semanas pude entender su entusiasmo. Durante décadas he jugado en diferentes clubes y clases. Gracias a mis estudios deportivos obtuve la licencia de entrenador y empecé como entrenador de jugadores en el sector amateur a finales de los 20 años. 2 clubes, 1 promoción, activos durante un total de 5 años.
Si usted mismo es entrenador, sabe que este trabajo puede ser bastante exigente. Los jugadores jóvenes no siempre tienen ganas, están (de fiesta) cansados, tienen problemas privados, les falta ambición, etc.
¿Cómo se puede formar un equipo que funcione a partir de diferentes personajes?
Como formador, debe, entre otras cosas
✅ dar un buen ejemplo,
✅ Sea accesible para su equipo,
✅ Centrarse en los puntos fuertes del individuo,
✅ Responder a las personas individualmente y mostrar comprensión,
✅ Desafiar a todos los jugadores y, en ocasiones, llevarlos hasta su umbral de dolor físico, pero sobre todo mental.
¿Y sabes qué?
Esto es exactamente lo que necesito ahora en mi vida profesional cuando trato con mis empleados (¡no te preocupes, el umbral de dolor físico aún no se ha agotado!). – Porque esta es la única manera de alcanzar los objetivos juntos.
PD: ¡El balón entró en la portería! 😁